Aquel día era todo felicidad y promesa de títulos en un estadio primermundista, lleno de lujos, un verdadero gigante de acero. Rogelio Funes Mori puso el segundo gol al minuto 57 y todo tomaba un orden tal como lo quería el conjunto regio. Santiago Rivera, otro canterano, puso el tercer tanto, pero no fue buen augurio para él, se fue del club en 2016 rumbo a Cafetaleros de Tapachula y ahora milita en Alacranes de Durango.
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Desde ese momento, el Estadio BBVA ha tenido más lágrimas que alegrías, pues la primera final de liga que jugaron fue una derrota contra Pachuca, que tenía 10 jugadores en el campo, todos agazapados en su portería y Víctor Guzmán en una jugada trabajada metió el testarazo para darle el título a los Tuzos del Clausura 2016.
La siguiente oportunidad para ganar una liga fue contra Tigres. Todo estaba listo para que el Gigante de Acero gritara como nunca el campeonato frente al odiado rival, pero las cosas no salieron así. Errores de Hugo González combinados con aciertos de Gignac y Francisco Meza hicieron que los felinos dieran la vuelta en campo rival, en el Apertura 2017. También perdieron la Copa MX contra Cruz Azul.
Pero no todo han sido lágrimas. Lograron la Copa MX frente a los Tuzos en ese diciembre de 2017 y también consiguieron la Concacaf Champions League frente a Tigres, en clara revancha por lo sucedido en la Liga BBVA MX. Ahora buscan su primera corona liguera y este torneo es el elegido para ellos.
