Sigue sucediendo que nos atragantamos con la herramienta del VAR y hoy resulta la nueva justificación de los entrenadores para explicar el comportamiento de sus respectivos equipos.Se ocupa también para que algunos analistas arbitrales descalifiquen la labor de sus colegas en activo.Para el comunicador, el analista deportivo, el mejor distractor para pasar de largo de otros temas como:*La solvencia con la que Cruz azul resolvió su eliminatoria.*La inteligencia y valentía con la Querétaro vino a jugar la vuelta contra La Máquina.*El oportuno despertar de las figuras de Monterrey, hoy el caballo negro de la liguilla.*El honor mostrado en la cancha por Santos, que no se vio del todo reflejado en las tribunas y fuera del estadio por algunos pseudoaficionados.*El despertar Puma, en un estadio que tenía mucho tiempo sin rugir en la forma que lo hizo el pasado domingo.*Un nuevo fracaso Tigre, que en su época dorada no ha conseguido la cantidad de títulos que su inversión merecería.*América que vio en su rival, algo que suele hacer con frecuencia, levantarse de las cenizas y pelear fuerte cuando parece imposible.*Toluca y una reacción tan gallarda como tardía.Pero pasamos de largo de esos temas y dedicamos demasiado tiempo a analizar el trabajo arbitral.El VAR fue diseñado para mejorar la impartición de justicia en la cancha, pero nunca podrá borrar la polémica que existe alrededor de las decisiones que un árbitro toma.El VAR es una herramienta que ayuda y mucho, pero mientras sea el criterio humano quien tome la decisión final, habrá controversia en mayor o menor medida. Nadie dijo que sería infalible.Vienen las semifinales y la invitación para hablar más de futbol y menos de arbitraje. Desconozco si sea mucho pedir.¿Qué opina usted?