Todavía apagada, la antorcha olímpica de los Juegos Olímpicos se somete ensayo general

Todavía apagada, la antorcha olímpica, que recorrerá Francia durante 80 días antes de los Juegos de París 2024, que pronto tendrá su sorteo de futbol, paseó este viernes por el departamento del Aube (centro-norte de Francia), en un ensayo general destinado a probar la seguridad de la caravana.

Una unidad de fuerza móvil será la encargada de luchar contra cualquier forma de desorden público mientras la antorcha recorra el país, desde su llegada procedente de Grecia el 8 de mayo hasta la inauguración de los Juegos, el 26 de julio.

Un convoy de 400 personas, casi la mitad miembros de las fuerzas del orden, se lanzó a recorrer el departamento situado a unos 200 kilómetros al este de París.

Con el amanecer y la bruma matinal en la abadía de Clairvaux, en la comuna de Ville-sous-la-Ferté, aparece el pelotón de gendarmes y policías, algunos de uniforme, otros en pantalones cortos, zapatillas y auriculares para asegurar la protección del portador de la antorcha.

Gérard Beureux, presidente de la asociación "Renaissance abbaye", que gestiona el sitio, se pasea con una sonrisa y observa la agitación, ilusionado imaginando cuando la verdadera antorcha llegue porque "las imágenes viajarán al mundo entero".

El gran objetivo de la jornada es probar la coordinación del convoy de seguridad que protegerá la llama, que no está encendida.

"Un poco decepcionante", reconoce el presidente del comité de organización, Tony Estanguet. "Pero el día D, con la llama, será muy espectacular", añade al lado de la ministra de Deportes y de los Juegos, Amélie Oudéa-Castéra, y el alcalde de Troyes, François Baroin.

La ceremonia de la llama olímpica, en la que el remero griego Stefanos Duskos, campeón olímpico en Tokio, encenderá la antorcha, se llevará a cabo el 16 de abril en el estadio de la antigua Olimpia, en Grecia.

Después la llama partirá en barco desde el puerto de El Pireo hasta Marsella, donde llegará el 8 de mayo.